lunes, 2 de noviembre de 2009

Tailandia, Bangkok y Koh Chang

Dejamos Kolkata (Calcuta) y regresamos x 4ta vez a Tailandia, a Bangkok, mas cargados que nunca, nos tomamos 2 bondis, 1 skytrain, y 2 taxis (al primero no le pagamos) y llegamos al Hotel Atlanta en la parte linda de Bangkok. No teniamos ganas de alojarnos en el caos de Khao San Rd. El hotel esta atrapado en algun lugar de los anios 60-70, te sentis todo el tiempo en la peli el Resplandor.

De hecho teniamos una seniora en el 4to piso, que golpeaba puertas sin parar, juraba que unos chicos (q no existian) le golpeaban su puerta durante la noche, por lo tanto no se animaba a entrar a su habitacion. Pero tampoco se iba a otro hotel, pasaba la noche en el pasillo y cuando te veia te preguntaba si habias visto a los chicos, juro q daba miedo.

Lo que realmente valia la pena del hotel era la pileta. Enorme. Un placer necesario en el calor de Bangkok.

Nos quedamos 2 dias en que aprovechamos para reencontrarnos y salir con Temiko, amiga kiwi. De aqui nos iriamos rumbo a Koh Chang, una isla paradisiaca por dos semanas, para relajarnos antes del regreso a la Argentina.

La pileta, increible.



Noche en Khao San con Temiko, resumo la noche con un, terminamos mal.




Recorrimos el Bangkok lindo, el de los shoppings y la modernidad de su Skytrain.



Tuk-Tuk tratando insistenetemente de llevarnos a algun lado.



La llegada a Koh Chang fue rara, porque llegabamos por la noche y la isla era mas grande lo que especulabamos, por lo tanto no sabiamos a que playa dirigirnos, la idea era encontrar un lugar y no movernos mas. Relajarse.

El primer dia nos fuimos al final de la isla a Bang Bao, pueblo que construyeron sobre el agua, insolito, porque tenian mucha isla al pedo para aprovechar. No importa, dormimos en un cuarto muy lindo sobre el agua y a la maniana nos fuimos
a Lonely Beach, siguiendo una recomendacion.

Lonely Beach, era el paraiso, cabanita sencilla a 5 metros de la playa, el precio no lo digo, para no hacer sentir mal a nadie.

Fueron dos semanas sin hacer nada. Al principio nos llovio por 4 dias, pero era todo tan increible y relajado, q no importaba. Playa habiamos tenido muchisima y disfrutabamos comiendo y tomando birras, viendo la lluvia desde nuestra terracita. O sino nos caminabamos unos 200mts por la playa para ir a al Bar Treehouse, donde nos colgabamos todo el dia en sus hamacas paraguayas. A la noche a algun barcito a escuchar alguna banda de reggae.

Fotos de nuestros dias feos, juzguen si daba para amargarse.

Nuestra bungalow junto al mar.



Tomando una birras.



Bar Treehouse




El paso de nuestro hotel al bar, increible que con la cantidad de veces que cruzamos nunca nos hayamos caido.



Banda de Reggae x la noche.



La playa.



Luego de estos dias que hubieran decepcionado a mas de uno, vinieron los dias de sol, si hasta el momento la habiamos pasado muy bien, ahora seria increible. Todos los dias teniamos ganas de ir a recorrer otra parte de la isla, pero estabamos tan bien que siempre lo dejabamos para otro momento, finalmente no lo haciamos, jaja.
No hay mucho para contar sino que pasariamos los 10 dias q nos quedaban sin hacer nada, perdon que no haya grandes historias o aventuras, pero nos lo mereciamos.

Un poco de playa con sol.




Recorriendo el pueblo.



Un lindo atardecer.



Festejando los 27, le improvise una torta de arena, conseguir una torta real era bastante dificil. El regalo de cumple estaba abriendo la puerta, una playa paradisiaca x diez dias, jeje.



Junto a los bungalows y el mar.



La amante de los masajes tailandeses, se dio unos junto al mar, en un dia increible, pocas veces vimos atradeceres tan lindos.







Los dias pasaron y llego el momento de partir, triste. En ese momento termino el viaje, faltaban 2 dias en Bangkok, pero ya estaba, habia terminado.

Regresamos al hotel Atlanta, nos encontramos con los gallegos, recorrimos la noche de Bangkok por ultima vez, triste despedida y el fin del recorrido asiatico.

Atento a la prohibicion.



Lindos los saltamontes fritos. Nos comimos una bolsa.



Ultima con los gallegos. Javi y Lau, una masa.



Termino una etapa, no el blog ni nuestros viajes, gracias por haber leido y seguido nuestras pequenias historias a traves del blog. Nos hizo feliz compartirlas y saber de gente que lee esto que ni nos imaginabamos.

Como leimos en otro blog, creo que el de Freddy y Magda otros lindos viajeros. Si torcimos el rumbo de algun viajero hacia nuestros destinos o incentivamos a algun dudoso a armar la valija y seguir, este blog si que valio la pena.

Nacho y Naza o Naza y Nacho.

Continuara...